Wejën Kajën 3: Nunca sabes hacia dónde te conducirá el primer paso...

Querido diario.

Estos días han sido maravillosos. 

El viernes fue mi último día en mi centro laboral. Muchos aprendizajes, muchas emociones, muchos corazones. Planeamos, implementamos, acompañamos y evaluamos múltiples actividades. Un pequeño gran equipo que llevó con con creces una tareas:

• Coordinación de Diplomados.
• Edición de un libro.
• Coordinación de un congreso internacional.
• Coordinación de eventos de vida universitaria. 
• Revisión y adecuación de planes de estudios de posgrados.
• Revisión y adecuación de planes de estudios de diplomados.
• Revisión y adecuación de planes de estudios de especialidades. 

Me siento pleno al dejar encaminado varias cosas y sobre todo el impacto en mi equipo de la forma administrativa que implementamos: por procesos y en línea. ¡Fue FENOMENAL! Hoy hicimos nuestra comida de despedida. 

El mismo viernes fue mi participación en una entrevista de radio y como conferencista magistral en el Segundo Congreso Internacional de Educación Virtual. Tenemos que repensar nuestras maneras de hacer las cosas como personas tanto estudiantes, profesores, sociedad civil y tomadores de políticas educativas. Aquí te comparto mi charla.... Te advierto, me oigo como robot.

 

El 2009 fue particularmente interesante pues en los meses de esos años nos dedicamos a realizar distintas presentaciones del material bibliográfico que habíamos elaborado el año anterior. Poco a poco los comentarios fueron afianzando en mi persona un sentimiento de seguridad que estaba orientando mi trayectoria. 

La combinación de mi experiencia y trayectoria que llevaba conmigo hasta ese momento me permitieron tejer nuevos hilos para hacer presencia en diversos espacios académicos y científicos hablando de Wejën Kajën para la educación. Poco sabía yo que ello me llevaría a campos de la filosofía, de la antropología, de la pedagogía, de la educación, de la educación matemática, entre otros. ¿Cómo tejer todo ello en mi persona?¿Cómo mostrar todo ese entramado en mis discursos? Solo fluí. Sin explicaciones, sin etiquetas... Tal vez la mejor respuesta a veces es solo fluir. Al final del tiempo me di cuenta que fue la mejor decisión. Pues me permití conocer diversas perspectivas, encuentros y desencuentros que conllevaban fuerzas e historias para lo que se estaba iniciando. Sobre todo cómo aquello me transformaba en otra persona que descubría sus múltiples impactos en distintos espacios del saber. 

Saludos y estamos en contacto.