¿Cómo estarían mis compañeros y compañeras con su español? Realizamos dos o tres exámenes de todas las materias, para elegir a aquél estudiante que representara a nuestra escuela en las competencias regionales, resulté ganador. Siempre me pregunté con ¿Qué calificación habré resultado ganador? - Tal vez nunca lo sepa.
Cuando dieron los resultados, la profesora (una monja, asistí a una escuela católica) dijo al grupo quienes habían quedado en cuarto, tercero y segundo lugar. Para luego pasar al primero y mencionar mi nombre. Inmediatamente después me preguntó. A menos que te cases ese día, no vas a poder participar. Entonces le diremos al segundo lugar que nos represente. ¿Vas a tener tiempo o te vas a casar? - Tenía 12 años de edad.
Frente a la emoción del primer lugar y la risa burlona del grupo, tuve que sobreponerme para no mostrar mi incomodidad, alcancé a decir en una voz entrecortada ¡Si voy a poder!
Quizá aquellas situaciones fueron la cereza del pastel para aquellos compañeros y compañeras que no podían asumir mis talentos, ya me molestaban por el tono de voz, ya por mi forma de ser, ya por mi inteligencia, ya por mis hermanas, ...
¿Qué me deparaba esa aceptación y esa afirmación de decir que podía? ¿Qué esfuerzos debía realizar? ¿Acaso solo era presentarme de nuevo a aquellas competencias sin prepararme?....
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Hoy estoy coordinando la Primera Olimpiada Regional Ayuujk Wejën Kajën 2022 con la intención de reconocer a las nuevas generaciones en campos escolares, en particular de las Matemáticas. Invitemos a niños y niñas de la región Ayuujk de Oaxaca México a participar
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